"Nada de lo aquí escrito me pertenece.
Si hubiese alguna pertenencia,
sería el lazo de Amor con el cual se han atado
tantas bellas flores de conocimiento
que son ofrecidas a la humanidad
como un ramillete de Servicio"
Montaigne.

la flor de loto

La flor del loto es uno de los más antiguos y profundos símbolos de nuestro planeta. La flor del loto crece en el fango y se alza sobre la superficie para florecer con remarcable belleza. Por la noche la flor se cierra y se hunde bajo el agua, al amanecer se alza y vuelve a abrirse. El loto simboliza la pureza del corazón y de la mente. Representa longevidad, salud, honor y buena fortuna.

lo bueno, lo malo, lo igual o lo diferente....son tan solo proyecciones humanas...

.º.º.º.º.º.º.º.º.º.º.º.º.º.º.º.º.º.º.º.º.º.º.º.º.º.º.º.º.º.º.º.º.º.º.º.º.º.º.

dijous, 6 de març del 2008

VOLVER AL AMOR: LOS MILAGROS. EL PERDÓN

V.- LOS MILAGROS
“Tu santidad invierte todas las leyes del mundo. Está más allá de cualquier restricción de tiempo, espacio, distancia, así como de cualquier clase de límite.”

1.-El perdón
“ Ante el glorioso Resplandor del Reino, la culpa se desvanece, y habiéndose transformado en bondad, ya nunca volverá a ser lo que fue.”

“Los milagros ocurren naturalmente como expresiones del amor.” Reflejan un cambio en nuestra manera de pensar, un cambio que libera el poder de la mente hacia los procesos de sanación y rectificación.
Lo que cambia es, principalmente, la manera como se nos aparece en la mente una experiencia, es decir, la vivencia que tenemos de ella.
El mundo humano es un mundo engañoso. El milagro no consiste en disponer de otra manera las imágenes del sueño. El milagro es despertarnos.

La física cuántica nos revela que a medida que nuestra percepción de un objeto cambia, el mismo objeto, literalmente cambia también.
Nuestra herramienta más eficaz para cambiar el mundo es nuestra capacidad para “cambiar la forma de ver el mundo.”

Nuestra percepción de nosotros mismos determina nuestro comportamiento. Si pensamos que somos criaturas magníficas, con una abundancia infinita de amor y de capacidad de dar, entonces tenderemos a conducirnos de esa manera, y la energía que nos rodee reflejará nuestro estado de conciencia.

“Los milagros, como tales, no se han de dirigir conscientemente”. Se producen como efectos involuntarios de una mentalidad amorosa, de una fuerza invisible que mana de alguien cuya intención consciente es dar y recibir amor. A medida que liberamos los miedos que llevamos dentro, nos convertimos en instrumentos de Dios, en Sus obradores de milagros.

Nuestro trabajo como maestros de Dios, si decidimos aceptarlo, consiste en buscar constantemente, en nuestro interior, una mayor capacidad de amor y de perdón.

Según UCDM perdonar consiste en ver, a través de la falsa idea de la culpa, la inocencia que está más allá . Perdonar no es otra cosa que recordar únicamente los pensamientos amorosos que diste en el pasado, y aquellos que se te dieron a ti. Todo lo demás debe olvidarse. Lo que se nos pide es que extendamos nuestra percepción más allá de los errores que nuestras percepciones físicas nos revelan -lo que alguien hizo, lo que alguien dijo- para captar la santidad en ellos que sólo el corazón nos revela. Entonces de hecho no hay nada que perdonar.

Como todas las mentes están conectadas, que alguien rectifique su percepción es, en algún nivel, una sanación de la mente de la raza humana como tal.
El perdón es un trabajo de dedicación completa y a veces muy difícil, pero hacer el esfuerzo es nuestra vocación más noble.
Marianne Williamson. Volver al amor